La Microdermoabrasión es un tratamiento que a través de agua y puntas de diamante realiza una limpieza profunda de la piel, eliminando las células muertas superficiales, grasa y puntos negros acumulados, disminuye el tamaño de los poros, mejora la textura áspera del rostro y atenúa cicatrices, logrando así una piel uniforme y suave.
Los resultados son paulatinos ya que el tratamiento requiere varios días, dependiendo del tipo de piel, la edad, y la patología que se trate. Tras la primera sesión, el paciente nota una mejoría visible.
Características: